mayo 24, 2015

Bendito fútbol

Juan Villoro una vez dijo: "El infierno y el cielo no están en el más allá, están en la cancha y sólo duran 90 minutos". 

Hoy se presentaron cuatro equipos a realizar faenas similares en sus respectivos terrenos de juego. Por un lado, el Guadalajara que venía de hacer un esfuerzo enorme ante su némesis local el Atlas y que consiguió avanzar gracias a un merecido resultado en el Jalisco; y por el otro, un Pachuca avasallador que venció al vigente campeón en el Coloso de Santa Úrsula. 

No obstante, frente a estos conjuntos se presentaban dos equipos que habían sido los menos esperados para llegar a instancias de liguilla: Santos que se colocaba en el 8vo lugar y que había vencido al líder general Tigres, y Querétaro que de estar en el lugar 15 a la llegada de Vucetich se transformó y se coló hasta la sexta posición. 

Estos últimos colectivos han materializado la frase de Villoro, pues en tan sólo 90 minutos de juego han mandado al infierno a unas Chivas carentes de entrega y a unos Tuzos contagiados de esa maldita enfermedad llamada "exceso de confianza"; y alcanzando para sí sus boletos para la Final del Clausura 2015, antesala del mismísimo cielo mexicano.

Palabras más, palabras menos...que bonito es el fútbol.